Saludos Cultistas.
Empezaré a poner algunas recomendaciones de películas de horror que me han gustado. Solo le pido que recuerde que ninguna opinión ajena puede sustituir la experiencia de presenciar una película con sus propios ojos. Así que al final de cuentas, lo único válido es su propio juicio.
"Bug". USA, 2007. Dirigida por William Friedkin.
Ésta es una de esas películas de las que no sabes que esperar, ¡pero que resultan ser una auténtica sorpresa! Digo, si vez que se trata del mismo director de la probablemente película de horror más popular de todos los tiempos, "El Exorcista", es normal que uno tenga ciertas expectativas; sin embargo, nada más empezar la película te das cuenta que es algo completamente distinto a lo que podía pensarse...
A ver: la película básicamente describe el descenso a la locura de una solitaria mujer. Es sobre los terribles efectos de la soledad y como, en un intento de escapar de ella, a veces uno está dispuesto a aceptar la primera oportunidad que se presenta, aún y cuando todo parezca indicar que se trata de un grandísimo error. Ya saben, caso típico y común a lo largo de la historia de la humanidad. Pues bien, básicamente eso es todo. Así de simple y muy minimalista en cuanto a puesta en escena. Solo salen unos 6 actores, toda la acción transcurre en unos dos escenarios... De hecho tiene un aire de cine barato experimental que no es lo que se espera de un director como Friedkin. ¡Pero que conste que tampoco se espera lo brutal que es!
En verdad, es una película muy difícil de soportar, es muy densa, y no me refiero a lo explícito de sus escenas, sino que es densa a nivel mental: cada toma hace dudar al expectador de lo que está viendo, y cuando menos lo piensas te arrastra a la histeria de los personajes en la pantalla ¡Carajo, de hecho en algún punto me afectó tanto que me descubrí rascándome cierta área de mi anatomía en busca de "insectos"!
La película tiene toda la fuerza de una producción de teatro experimental, y es que bueno, de hecho está basada en una obra teatral. El trabajo de los actores es maravilloso, no te da ninguna tregua, te hace dudar de ellos, de ti mismo, de tus ojos, de lo que ves en la pantalla y de aquello que no se ve... sobre todo de ésto último.
Vaya, no pareciera ser la obra de un director consagrado, más bien luce como el intento de un novato de enseñarle al mundo como hacer cine con huevos, ¡y sin despeinarse en el intento!
¡Vale mucho la pena!
-Un Shogotth Cinéfago